sábado, 26 de diciembre de 2009


Conformación y aplomosHugo Funtanillas, Médico Veterinario, especialista en Podología Equina. Argentina
Aplomos, es un tema, sobre el que, no sólo hay suficiente información en obras de distinta naturaleza relacionadas con la hipología y podología general, sino que, puede decirse que en general no hay discrepancias o aspectos controvertidos respecto de su descripción, connotaciones de los defectos, etc.

Pero en mi opinión, y desde el punto de vista pedagógico/didáctico, debería centrarse mayor atención en las condiciones básicas necesarias para la evaluación, como son: pisos adecuados, luz adecuada, posición correcta del equino, paciencia del evaluador, tiempo asignado al examen y por último la metodología de examen. Más allá de los items específicos que hacen a la descripción de los aplomos, (líneas, defectos, etc), la experiencia diaria muestra que pueden hacerse evaluaciones incorrectas cuando no se contemplan aspectos como los señalados anteriormente, arribando por lo tanto, a conclusiones también incorrectas. Por ejemplo: de un examen de aplomos practicado en un corral reducido, con la presencia de otros caballos, polvo, poca luz natural y de prisa, no puede esperarse un juicio valedero. Tampoco puede hacerse una evaluación correcta dentro de un box o desde la puerta del mismo. De esto puede deducirse que todos esos tópicos son tan importantes como las líneas en sí mismas. La correcta conjunción de las variables, redundará en un dictamen final con menor margen de error.

También es importante conocer las connotaciones biomecánicas o patológicas de las distintas desviaciones de los miembros.

¿QUE SON LOS APLOMOS?: las que siguen, son algunas formas de expresar el significado del vocablo "aplomo":

•1. Dirección que deben seguir los miembros considerados en su totalidad y en sus regiones en particular, para que el cuerpo sea soportado de manera más sólida y favorable para la ejecución de los movimientos.
•2. Dirección que tienen los miembros bajo el tronco, considerados en la estación y en la marcha.
•3. Dirección que sigue el eje de los miembros en relación al plano medio del cuerpo y al suelo.
•4. Relación de los radios óseos con la horizontal.
•5. Condiciones normales de la mejor condición de las palancas óseas de los miembros.
Aunque en sentido estricto, "aplomo" es "verticalidad", el concepto es más amplio por abarcar la "correcta conformación de los miembros".

La ateleología, estudia los defectos de dirección de los miembros ( dedo incluido).

Mientras que muchos clásicos como con sentido estético, han descripto la dirección de los miembros con respecto a la plomada, los ángulos falangeanos en relación al suelo; la distancia entre cascos o entre nudos, etc, otros, han polarizado el estudio desde la función y las distintas conformaciones que dan lugar a adaptaciones a la misma, sin considerar otros aspectos. Las dos posturas no sólo son válida, sino que están íntima y directamente relacionadas a partir de la existencia de la dualidad forma - función.

Por esto, no existirían razones para encarar el estudio del exterior equino sobre ideas absolutas de estética (que conducirían a error de apreciación respecto de la "buena conformación" en casos particulares). También sería un error, considerar defectuosos aquellos sujetos que no presenten una conformación de regiones muy semejante o igual a aquella considerada como típica. Esto está basado en la gran variedad de grados para una misma conformación que puede ser considerada "anormal", Por lo tanto, no es conveniente aferrarse a un enfoque absolutista, pero a su vez, no debe perderse de vista la dualidad señalada antes...

De allí la importancia de sostener que: si bien los conceptos de estética (belleza plástica) y simetría son muy importantes, esos conceptos deben también ser relacionados con una aptitud o función particular, (e incluso deben formar parte de los preceptos a tener en cuenta por el herrador, para no intentar intervenciones innecesarias con fines de corrección).

La distribución uniforme de presiones no se lograría con extremidades que se aparten de la verticalidad, es decir, de la línea de aplomo (obviamente dependiendo del grado de desviación), independientemente de que en algunos casos esa "conformación irregular", sea producto de la adaptación a una función determinada o incluso en otros casos que una conformación congénita represente un carácter deseable para una determinada función como podría ser el caso del "sentado de garrón" respecto a la función de impulsión, pero...¿dónde ubicamos en estos casos la línea divisoria entre el "ideal objetivo" -en relación a la función- y el "carácter indeseable" -defecto-?, más aún teniendo en cuenta que algunas razas traen genéticamente rasgos como el citado (que también pueden ser otros).

EXAMEN DE LOS APLOMOS: para la apreciación y descripción de los aplomos normales o defectuosos, se toman ciertas referencias, que se conocen como líneas de aplomo y que en todo caso, se trata de líneas imaginarias verticales que a modo de hilo de la plomada, llegan al suelo partiendo de un punto superior anatómico fijo, que será distinto cuando se trate de los miembros anteriores o los posteriores y cuando la observación se haga de frente, de perfil o de atrás. Se podrá así evaluar el eje del miembro en conjunto y de cada una de sus regiones en particular.

No desarrollaremos aquí la descripción en detalle de las líneas de aplomo, porque no es la finalidad de este artículo.

A los fines de la evaluación de conjunto, es necesario disponer también de conocimientos que se relacionan directamente con los aplomos, como: regiones del exterior equino, centros de suspensión, centro de gravedad, base de sustentación, dinámica de los andares, concepto de defecto y tara, concepto de belleza, etc.

IMPORTANCIA DE LOS APLOMOS: La importancia de la correcta conformación de los miembros, se pone en evidencia:

1. En la distribución de presiones.
2. En la forma de apoyar los cascos sobre el terreno.
3. En la dirección de la columna vertebral.
4. En las relaciones angulares de las articulaciones.
5. En la agilidad del equino.
6. En el poder de tracción.
7. En la estabilidad -por su relación con la base de sustentación-.
8. En la facilidad para el manejo.
9. En la disposición para la equitación.
10. En la belleza plástica.

¿CUÁNDO SE NECESITAN LOS CONOCIMIENTOS DE LOS APLOMOS?

Son variadas las circunstancias en las que pueden necesitarse los conocimientos de aplomo, entre las que podemos citar:

a.El examen previo del equino a herrar (herrados normal y correctivo).
b.En el asesoramiento veterinario de compra.
c.Como parte de la evaluación en exposiciones.
d.Como parte del importante trabajo en los establecimientos de cría.
e.Como carácter de belleza fundamental integrante del estándar de cada raza.
f.Para el médico veterinario clínico, como disciplina de base en la semiología del aparato locomotor, para la resolución del problema claudicógeno.

PRESIONES BIEN DISTRIBUIDAS

Constituye el tópico más importante a tener en cuenta. Todo gira alrededor de la correcta o adecuada descomposición de fuerzas y distribución de presiones de proximal a distal y la reacción de distal a proximal.

Las consecuencias de la mala distribución de presiones, producto de ejes defectuosos, se pondrán en evidencias a través de patologías con asiento en distintos puntos, comprometiendo el rendimiento y la vida útil del equino a mediano o largo plazo, o su uso en lo inmediato. Es importante resaltar que los distintos plazos en que pueden aparecer las patologías, está en relación directa a la gravedad del defecto y las exigencias físicas a que sea sometido el equino dado que no es lo mismo las demandas de cualquier disciplina deportiva, que el simple servicio de paseo. Bajo el concepto de "ejes defectuosos" deben incluirse: desviaciones angulares y flexurales; rotaciones; inclinación o verticalidad indeseables, separaciones excesivas o deficientes, etc. (siempre considerando el miembro en conjunto o algunas de sus regiones en particular).

En algunos defectos, además de ser incorrecta la descomposición de fuerzas, está comprometida la estabilidad por reducción de la base de sustentación (remetidos de adelante, corvos, cerrados de adelante + izquierdos, etc).

Otro aspecto importante a considerar, es que muchas de las patologías pueden asentar -además- en lugares anatómicos "alejados" del punto problema (lugar del defecto, por ejemplo) y ello es debido al intento de compensación de la masa corporal en conjunto sobre la que se ejercen fuerzas anormales, induciendo a que determinadas estructuras anatómicas, asuman roles fisiológicos para los cuales no están naturalmente diseñadas, las que finalmente terminan dañándose con algún grado de evidencia clínica que llevará aparejada la interrupción del servicio o su ejecución con limitaciones, con las consiguientes consecuencias (gastos, compromiso de participación en torneos, etc.).

Pero antes que la manifestación clínica sea evidente y motive la consulta al médico veterinario, se pasa por un período previo (no estimable en tiempo) de una "irregularidad silenciosa" (expresión del autor), de cambios no siempre claros en el animal, que incluyen dificultades para hacer algunos ejercicios, a veces algún grado de molestia e irritabilidad, etc., que incluso antes del examen clínico, pueden ser adjudicados -por quienes rodean al animal- a causas varias. Si en esta etapa, el médico veterinario busca dolores, los encontrará y a distintos niveles, por ejemplo: ligamento suspensor del nudo, músculos lumbares, músculos isquiotibiales, bridas, etc.

El pie, es quien en última instancia recibe las consecuencias de miembros mal conformados y cuyas estructuras también se verán afectadas por irregular distribución de las presiones que le llegan. Pero también el pie es parte del conjunto y debe estar bien conformado en cuanto a forma, volumen, ángulos, inclinaciones, proporciones, etc. (además de bien tratado por el hombre).

Este concepto de "irregularidad silenciosa", debe ser tomado con atención especial, ya que son muchas las situaciones en que por ejemplo una mialgia dorsolumbar o isquiotibial (podrían citarse muchas otras alteraciones), tiene punto de partida en incorrectos ejes de los miembros, (teniendo en cuenta también, que con mucha frecuencia es el hombre quien genera los problemas, a través de la intervención en el herrado, sin conocimientos adecuados) lo que, sumado al trabajo propio del caballo, causará alteración suficiente para necesitar la intervención del médico veterinario.

Por lo tanto, es de buena práctica clínica ante cuadros como éstos (de cotidiana presentación), además de realizar una prolija anamnesis (historia), comenzar por evaluar los aplomos y los aspectos relacionados con el herrado (antigüedad, largo del casco, altura de talones, eje podofalangeano, balance del pie, nivel de los miembros entre sí, aspectos de la herradura, el clavado, etc.) y decidir sobre la necesidad de trabajo del herrador.

Algunas de las patologías posibles, derivadas de la mala distribución de presiones, son:

1. Formas falangeanas.
2. Exceso de tensiones sobre ligamentos colaterales.
3. Esfuerzo de brida radial.
4. Mayores tensiones sobre cápsulas articulares.
5. Exostosis intermetacarpianas.
6. Exostosis postmetacarpianas y postmetacarpianas profundas.
7. Hidrartrosis de nudo.
8. Osteítis interfalángicas.
9. Fracturas carpales o tarsales a pequeño fragmento.
10. Esfuerzos tendinosos y ligamentosos (flexores y ligamento suspensor del nudo).
11. Fatiga muscular, tendinosa o ligamentosa.
12. Tenosinovitis.

En resumen: Con miembros bien conformados, habrá correcta biomecánica y con ella, adecuada descomposición de fuerzas y distribución de presiones. No habrá daño músculo esquelético, el rendimiento será óptimo y la vida útil se verá como mínimo, conservada.

ABSORCIÓN DEL IMPACTO Y DISIPACIÓN DE ENERGÍA: Como parte del natural movimiento de traslación, hacia delante y hacia abajo, los miembros se aproximan al suelo, poniéndose de manifiesto la inevitable relación -desde la física pura-, de las fuerzas en juego en relación al terreno. Un sistema de fuerzas descendentes, representado por fuerzas aplicadas de proximal a distal y perpendiculares al piso y un sistema de fuerzas ascendentes, opuesto al anterior (acción y reacción).

Los cascos entonces, como estructuras distales que son, actúan como iniciales amortiguadores del impacto, produciendo una rápida desaceleración que, bajo la forma de vibraciones, viajan hacia proximal por los miembros y que en muchas ocasiones y por factores diversos, pueden ser causa de patologías como desmitis, tendinitis, miositis, periostitis, osteoperiostitis, artrosis, etc. Esta función es compartida con las "zonas blancas" (tejido laminar y línea blanca), ranilla (con limitada tolerancia), barras, suela y callo solear e incluye por supuesto el borde perisolear de la muralla, que es la parte que está en contacto con el piso pero que no estaría diseñada histológicamente para soportar peso, razón por la que no hay sobre este punto, un criterio uniforme entre los distintos autores pero de hecho, esa función es ejercida. En este mecanismo de disipación de energía, actúan además de la angulación propia de los miembros que descomponen fuerzas, el hueso y el cartílago.

El hueso, absorbe el shock con eficiencia; no obstante, ante impactos excesivos, pueden producirse en él, microfracturas como mínimo daño.

El cartílago, por su constitución histológica, es igual o más eficiente que el hueso para absorber el impacto, pero dado que en las articulaciones se presenta como una delgada capa, su participación es cuantitativamente menor o pequeña en este rol. Los impactos repetidos y de gran magnitud, pueden ocasionar daño al cartílago -a veces irreparable-, con enfermedad articular degenerativa como resultado final.

LOS APLOMOS DEL POTRILLO: finalmente, válido es señalar la importancia de los aplomos en el potrillo y en relación directa a su futuro como potencial atleta.

Son muchas las causas o patologías que actúan en el potrillo desde el nacimiento y que incluso pueden comprometer su vida, pudiendo citarse entre ellas: dismadurez, enfermedades autoinmunes, enfermedades infecciosas, neumonías, diarreas, etc.

En el caso de los malos aplomos, obviamente ellos no atentarán contra la vida del potrillo, pero la desatención a los miembros en particular, conducirá a la posibilidad cierta de tener que eliminar a corto plazo, a un ejemplar que se sabe, no estará en condiciones de afrontar las importantes exigencias físicas de un determinado deporte, lo cual implica una pérdida económica que en cualquier caso será importante, considerando la multiplicidad de factores que contribuyen a obtener un potrillo nacido. De lo expuesto se deduce la importancia a asignar a este aspecto en los establecimientos de cría, lo cual incluye selección, nutrición, manejo, detección temprana, tratamiento, etc.


CONSIDERACIONES FINALES:

1. Resulta muy difícil encontrar un equino cuya conformación pueda cubrir en un 100 % el concepto de belleza estética; es entonces conveniente, manejar equilibradamente los conceptos de belleza plástica y belleza funcional.

2. Es fundamental cuando se resuelve adquirir un equino, tener en cuenta el destino que se le dará, dado que ello definirá la mayor o menor permisividad de defectos de aplomo. Aquí cobra relevancia el asesoramiento del médico veterinario especialista, dado que deberá buscarse siempre el equilibrio entre lo permisible y lo inadmisible en cuanto a aceptación o rechazo, o lo que es lo mismo decir, evaluar correctamente los caracteres de belleza absolutos y relativos. No es lo mismo el uso del caballo de silla para simple esparcimiento uno o dos días a la semana, o el destino para escuela de equitación, o paseo en parque, que las disciplinas de salto, polo, trote, endurance, o tareas rurales, etc. En resumen, la sola presencia de un defecto, no significa descarte: sólo se trata de tener en cuenta la gravedad del defecto en relación al destino o aptitud del equino. A mayores exigencias, mayor necesidad de miembros correctos.

3. Hay defectos que no son admisibles para ningún destino, como es el caso de los defectos groseros, sobre todos aquellos que puedan comprometer la estabilidad por reducción de la base de sustentación o por las posibles interferencias en la marcha.

4. Es importante tener claridad sobre las connotaciones de los distintos defectos, porque ello permitirá inferir sobre posibles patologías a corto, mediano o largo plazo. (trascorvos, izquierdos severos, etc). Esto también es particularmente importante en la producción del SPC, en la que, en todo defecto detectado, habrá que hacer la proyección de futuro, respecto del crecimiento con aumento natural de peso y los efectos posteriores de doma y entrenamiento.

5. No debe pensarse en aceptar algunos defectos particulares sobre la idea de posible corrección con herrado. No olvidemos que esto está íntimamente relacionado con la edad y osificación y que no todos los defectos son tratables por la vía del herrado (sobre todo las desviaciones del nudo hacia arriba).

6. Para aquellas personas que no tienen suficiente experiencia en la evaluación de los aplomos, es fundamental el asesoramiento de otra que sí la posea, o del médico veterinario con práctica en los equinos, para evitar descubrir defectos importantes cuando la operación comercial ya fue realizada, o bien sufrir las consecuencias de ellos por patologías de distinta naturaleza que producen claudicación y que obligan a un uso muy irregular o nulo, lo cual tiene "per se"un impacto económico directo; esto es, inversión realizada con utilización comprometida del equino.

Curso de producción equina de la Ing. Valeriani




Caballo
Clasificación científica
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Orden: Perissodactyla
Familia: Equidae
Género: Equus
Especie: E. caballus
Nombre binomial
Equus caballus
Linnaeus, 1758

El caballo (nombre científico Equus caballus) es un mamífero perisodáctilo de la familia de los équidos, herbívoro, cuadrúpedo y de cuello largo y arqueado.

A la hembra del caballo se le llama yegua a los machos sementales y a los ejemplares jóvenes, potros si son machos, y potrancas si son hembras. La cría y utilización del caballo por parte del hombre se conoce como ganadería equina o caballar.

Etimología
El nombre del "caballo" procede del latín caballus que daba nombre al 'caballo castrado'; del femenino latino equa derivó en "yegua" y a los animales jóvenes en general se les denominaba pullus, textualmente 'pollos'; de ahí que de una palabra del latín vulgar *pulliter, pullitri derivara "potro" ó "potrillo".

Origen

Evolución del caballo.La evolución del caballo puede seguirse a través del registro fósil hasta llegar a Hyracotherium (también llamado Eohippus), un pequeño mamífero herbívoro que vivió durante el Eoceno, hace 55 millones de años. Se supone que de él descienden todos équidos posteriores, incluido el género Equus. Hyracotherium tenía un tamaño que oscilaba entre los 20 y los 40 cm de altura, con cuatro dedos en las extremidades anteriores y tres en las posteriores terminando cada uno en una uña (no en un casco, como las especies actuales). A primera vista era similar a un perro pequeño. Sus orígenes se pueden encontrar en América del Norte, donde se extinguió. Muchos años más tarde serían los colonizadores españoles quienes reintroducirían el caballo en el continente americano.

La evolución posterior de Hyracotherium le hizo aumentar su altura hasta los 115 cm y perder sus dedos hasta hacerse monodáctilo, es decir, con un solo dedo. Poco a poco, su único dedo se endurecería hasta desarrollar cascos para poder huir de los depredadores.

En esa época aparecieron a la vez en Norteamérica y Eurasia diversas especies y géneros relacionados. Parece ser que las especies euroasiáticas desaparecieron; sin embargo, las especies americanas dieron lugar durante el Oligoceno al género Mesohippus del tamaño de una gacela, que tenía sólo 3 dedos en las patas delanteras y que ya presentaba pies con forma de casco.

Algo más tarde, en el Mioceno, a Mesohippus le sucedió Hypohippus y Anchitherium; se cree que ambas especies colonizaron después Eurasia desde América del Norte. Otros descendientes de Mesohippus fueron Miohippus y Merychippus; este último género desarrolló dientes con coronas muy altas, lo que le permitió, a diferencia de Hyrachotherium, que pastaba hierba, ramonear las hojas y brotes de árboles y arbustos. Entre los descendientes de Merychippus estaba Hipparion, que durante el Plioceno se desplazó y expandió desde Norteamérica hasta Eurasia, y Pliohippus (primer antepasado de un solo dedo), antecesor de Pleshippus y de su sucesor, el caballo moderno, es decir, el género Equus. El paso entre América del Norte y Eurasia se realizaba a través del estrecho de Bering cuando ambos continentes estaban unidos.

Se cree que durante el Pleistoceno el género Equus extendió su área de distribución desde Norteamérica a Eurasia, África y Sudamérica. Algún tiempo después los caballos americanos se extinguieron, quizá por alguna enfermedad. Diversos hallazgos en cuevas de Europa indican que el caballo era un animal muy abundante durante la edad de piedra en dicho continente; se han encontrado suficientes restos de esqueletos de caballos dentro y en los alrededores de estas cuevas como para afirmar que eran consumidos por el ser humano. El número de caballos disminuyó en el neolítico, cuando Europa estaba cubierta por bosques en su mayor parte. Se han encontrado restos de la edad del bronce, embocaduras y piezas de arneses, que demuestran que el caballo ya estaba domesticado en esta época.

Diversas especies extintas de mamíferos herbívoros, como los notocaballos y los litopternos sudamericanos, ambos grupos pertenecientes al superorden Meridiungulata, llegaron a parecerse mucho a los équidos a pesar de no estar relacionadas, debido a convergencia evolutiva. Tal es el parecido que erróneamente muchas fueron en un principio asignadas al género Equus.

Equidos actuales

Équidos actuales Los équidos actuales se clasifican todos en el género Equus que incluye los caballos, los asnos y las cebras.


El caballo (Equus caballus) es una especie domesticada desde la Edad del Bronce, que no se encuentra en estado salvaje, de la que existen numerosas razas. Ha sido usada por el hombre como animal de tiro, de carga y como cabalgadura.

Asnos Equus asinus, Equus africanus y Equus hemionus

Asno africanoSe considera que hay tres especies de asnos, el asno doméstico Equus asinus, el asno salvaje africano Equus africanus y el asno salvaje asiático u onagro Equus hemionus; excepto el primero, los asnos salvajes están amenazados de extinción.

Cebras Las cebras o zebras son équidos salvajes propios de África, cuya característica más notable es su pelaje rayado característico. Las cebras son negras, las rayas que tienen son blancas y no al revés como se creía hasta hace muy poco. Genéticamente su color es el negro, y allí donde no se logra la pigmentación se forman las rayas blancas.

En la actualidad existen tres especies y varias subespecies; la cebra común (Equus quagga), la cebra de Grévy (Equus grevyi) y la cebra de montaña (Equus zebra).

Etologia y Comportamiento:


El caballo es un animal gregario y necesita comunicarse con los otros miembros de la manada. Su "poderoso" instinto gregario esta siempre presente, y siempre tratará de volver junto a los compañeros de su especie o de permanecer junto a ellos, ya que esto le da seguridad.Con su sistema de comunicación pueden transmitir emociones básicas como el miedo y establecer una jerarquía de dominio sin violencia. Los caballos domésticos tratan a los humanos como miembros de su manada, por lo que usan el mismo lenguaje corporal para comunicarse con nosotros.

Es un animal herbívoro y sus mecanismos defensivos -o sea la aptitud física a a lejarse velozmente de la amenaza de un ataque y la posesión de sentidos muy desarrollados- están orientados principalmente hacia la huida como medio de conservación. esto explica la naturaleza nerviosa y exitable del caballo. Por lo general no son animales agresivos, y prefieren huir a combatir.

Los caballos son ciertamente sensibles a la atmósfera y son capaces de valorar el estado de ánimo de su jinete., convirtiendose en cierta medida en el espejo de la persona que los monta. Poseen la faculad de percibir al instante factores tales como la timidez o la vacilacion del ser humano, asi como la confianza y el valor.

El lenguaje corporal de los equinos es muy extenso y específico. Las cara del caballo posee indicadores básicos de su estado de ánimo y comportamiento.


NECESIDADES ESPECÍFICAS DEL CABALLO

Necesidades alimentarias: el caballo posee un estómago de dimensiones reducidas, en la naturaleza está comiendo de forma continua (alrededor de 15 horas al día) pequeñas cantidades de alimento rico en fibras (principalmente hierba).
Necesidad de sueño: el caballo descansa durante 6 horas diarias repartidas en cortas fracciones de tiempo, generalmente se echa unas 2 horas y se tumba completamente unos 45 minutos al día.
Necesidad de espacio: el caballo es un animal adaptado a los grandes espacios abiertos, su reclusión en lugares pequeños aumenta notablemente su estrés y su agresividad.
Necesidad de movimiento constante: el caballo camina durante el 80% de su tiempo, haciéndolo incluso mientras come.
Necesidades sexuales: aunque no existen estudios al respecto, es muy posible que tanto las yeguas como los sementales sufran los efectos de la ausencia de sexualidad. La actividad sexual a la que sometemos a la mayoría de ellos es absolutamente artificial y fuera de lo “natural” para la especie.
Necesidades sociales: el contacto físico con sus congéneres es vital para calmar el estrés y estrechar relaciones afectivas.
Necesidades afectivas: la estructura social del caballo se basa en lazos afectivos y en una comunicación constante entre los miembros de la manada, por lo que una relación conflictiva con el hombre puede tener efectos negativos en el comportamiento del animal.
Necesidad de juego: el caballo adulto dedica una hora al día al juego, siendo este tiempo mucho mayor en edades juveniles.
Necesidad de tranquilidad: el caballo es miedoso por naturaleza, necesita la tranquilidad para evitar las fases de estrés frecuente o prolongado.
Necesidad de comprender: está dentro de la naturaleza del caballo rehusar lo que no comprende, la necesidad de comprender del caballo se demuestra en su extraordinaria curiosidad.
Necesidad de estimulaciones sensoriales variadas: para que se desarrolle la inteligencia potencial del caballo es necesario que todos sus sentidos sean estimulados; si el medio artificial en el que vive es demasiado uniforme, algunas funciones mentales serán deficientes.


Cómo descansan los caballos

Por lo general es difícil sorprender a nuestro caballo durmiendo a pierna suelta ya que por ser un animal "predado", instintivamente se mantiene alerta para detectar cualquier peligro y poder huir a tiempo. Es raro hasta observarlo echado, pues a menos que se sienta muy seguro, se levantará en cuanto perciba nuestra presencia aproximandose a la caballeriza y lo encontraremos felizmente parado en sus cuatro patas.

Es muy probable que por eso exista la falsa creencia de que los caballos duermen de pie y que nunca se echan para dormir. Esto no es del todo cierto, ya que aún cuando sí acostumbran "dormitar" de pie, también llegan a dormir profundamente estando echados. Como siempre versátil e impredecible, el equino tiene diversos modos de descansar durante el día y la noche y a continuación trataré de describirlos.

Echado

No creas que el único equino que vas a ver echado en toda tu vida es la figurita de la mula del Nacimieto. En ocasiones los caballos llegan a echarse durante el día para descansar, esto es normal si lo hacen por periodos cortos, pero si se quedan mucho tiempo echados es probable que sea por algun problema de salud (dolor en las patas o en las manos, debilidad, dolor abdominal, entre otras). Ya sea durante el día o la noche, los caballos tienen dos maneras de echarse para descansar:
Aborregado .- En esta posición el caballo se echa sobre su esternón, sus costillas y sobre su abdomen (bueno, sobre su panza) sin recargar ninguno de los costados en el piso, con las manos flexionadas bajo el pecho y las patas dobladas bajo el abdomen y hacia un lado.



Echado a lo largo.- Aquí, el caballo se acuesta sobre todo un costado (en decúbito lateral), apoyando en el suelo desde la cabeza hasta la grupa. De este modo casi todo los músculos quedan inmóviles y relajados, permitiendo al caballo descansar.

De pie

Durante el día los caballos cambian el peso de una pata a otra, esta es una forma de descansar mientras estan de pie. Lo hacen liberando del peso uno de los miembros posteriores y apoyando únicamente la pinza (parte delantera del casco) de esa pata, en esa posición los tendones y músculos se relajan. Esto es considerado normal cuando lo realizan con las Patas (miembros posteriores), pero es anormal cuando lo realizan con las Manos (miembros delanteros), pues es indicativo de que el miembro descansado experimenta dolor.

Cuando estan "colgados" (atados fuera de su caballeriza) o si estan dentro de su caballeriza o en un corral pueden relajar todo su cuerpo y "dormitar" estando de pie, sin que por ello se pueda decir que estén durmiendo:

1.- Bajan la cabeza, relajan los músculos de la cara y los belfos quedan colgando.
2.- Bajan el cuello hasta que éste queda en posición horizontal y prácticamente a nivel del lomo.
3.- Descansan una de las patas.

El Sueño

Generalmente los caballos duermen durante la noche (ya que en el día se encuentran trabajando, comiendo o en muchas ocasiones asoleandose colgados fuera de su caballeriza). Las horas de menor actividad para cualquier caballo son durante la noche, tal vez sea solo por eso que aprovechan estas horas para dormir. Aún cuando es posible encontrar caballos durmiendo a pierna suelta, roncando e icluso hasta moviendose o relinchando (presumiblemente por un sueño), los caballos no duermen durante toda la noche. Duermen por algunas horas y luego se levantan, comen un poco, beben agua, caminan por su caballeriza o incluso juegan con su cubeta o su comedero y luego vuelven a dormir echados o a dormitar parados.

En la etapa en la que es más probable observar a un caballo dormir, es mientras es potro ya que como cualquier otro recién nacido requiere de mayores periodos de sueño. Los potros jóvenes duermen por periodos de alrededor de media hora a lo largo del día y la noche. Y es bastante común ver que los potros se muevan durante sus fases de sueño más profundo.

Vicios y Comportamiento estereotípico:

En este capítulo trataremos las conductas anormales del caballo, sus posibles causas, como prevenirlas y como tratarlas.
Vicios y Comportamiento estereotípico:
Los vicios del caballo son conductas anormales que interfieren con el manejo y que ocasionan quejas de los propietarios y entrenadores. Los comportamientos estereotípicos (estereotipias) son movimientos repetitivos y constantes sin un propósito aparente. Los vicios involucran algunos estereotipos como son excesiva agresividad, morder, patear e ingerir materiales de la cama (ver recuadro).
Listado de conductas estereotípicas
Origen de las conductas

Masticatorias Locomotivas Irritación cutánea Agresivas
Masticar goma Paso Patear la pesebrera (con las patas) Extender la cabeza, bajar las orejas y morder
Morderse los labios Entrecruzar las manos Rascarse Patear la pesebrera (con las patas)
Movimientos labiales Manotear Morderse
Masticar paredes de la pesebrera Batir la cola Sacudir la cabeza
Tragar aire Patear la puerta ( con las manos) Revolear la cabeza
Masticar madera Ladear la cabeza
Batir la cola


Siempre se debe descartar por un veterinario que el cambio de conducta del caballo no sea por razones médicas, como alergias, enfermedades cerebrales, dolores de espalda o de boca, etc. (ver artículos de septiembre y octubre).
Causas:
Como causa primordial de todos los vicios y estereotipos de los caballos está la domesticación, la vida confinada de un animal que desde el punto de vista evolutivo tiene su organismo y su mente preparada para vivir en extensos ambientes al aire libre y en compañía de otros de su especie.
No existe evidencia de que estas conductas anormales sean heredables, pero parecen ser aprendidas imitando los vicios de la madre. Estos problemas son más frecuentes en caballos de "sangre caliente" como los Fina Sangre de Carrera y los Árabes comparados con los caballos de razas pesadas, lo que se puede atribuir a que los primeros son manejados confinados en pesebreras.
Si bien las causas nutricionales aún no han sido demostradas, las dietas bajas en fibras pueden conducir a la aparición de comportamiento anormal.
Las causas psicológicas de las estereotipias son más fáciles de identificar. Involucran las sensaciones de frustración, de inaccesibilidad a algo deseado, de temor o miedo hacia determinados objetos o personas. Estas estereotipias a menudo son manifestadas cuando aparece el peón o la persona que cuida del animal. Generalmente existe una situación desencadenante, como el momento antes de ofrecer la ración.
Se pueden presentar a cualquier edad, pero son más frecuentes en equinos jóvenes sometidos a cualquier cambio en su forma de vida: el destete, en encierro luego de haber vivido en pasturas, o el cambio de los compañeros del establo o del personal que los maneja, puede originar comportamientos anormales. Por lo tanto se debe poner atención a los cambios en el ambiente, a la nutrición y a la interacción social entre los caballos.
En los párrafos siguientes se describen las causas y momentos en la vida de los caballos en que pueden adquirir conductas anormales, además de algunas medidas preventivas y correctivas de las mismas.
Es importante tener en cuenta que estas conductas una vez arraigadas en el caballo son difíciles de eliminar, por lo que las medidas de prevención son mucho más efectivas y vale la pena implementarlas.
EL DESTETE
La separación de la yegua y el potrillo luego de seis meses en donde generaron fuertes lazos entre ellos y con otros miembros de la manada siempre es traumática para ambos, especialmente para la cría si se lo mantiene en aislamiento:
• El destete en parejas de potrillos reduce en parte el estrés, observándose que así sobrellevan mejor la separación de sus madres. Los equinos manejados así dan menos trabajo y se integran más fácil a otros grupos.
• Otra manera es que una persona se encargue de acompañar al potrillo reemplazando a la yegua. Este pudiera ser el mejor método, pero muy poco práctico, ya que se necesitan entre seis a diez horas al día.
• También, los potrillos pueden ser destetados en forma paulatina y familiarizados con otros potrillos de la misma edad.
• Otra forma es colocar un caballo adulto que demuestre tolerancia a los potrillos. Generalmente esto lo puede hacer una yegua vacía, la que acompañe a varios potrillos destetados.
CONFINAMIENTO POR PERIODOS PROLONGADOS
Las estereotipias están asociadas con el encierro o confinamiento. Es muy probable que caballos mantenidos amarrados o en pesebrera por periodos prolongados, así como con dietas bajas en fibra o que no se ejerciten por lo menos dos horas al día, desarrollen comportamientos estereotipados. El tipo de pesebrera para los caballos que deben permanecer en ellas es de suma importancia para mantener la salud mental de ellos. Se debe considerar la posibilidad de que el caballo tenga un campo de visión amplio y que mantenga contacto con otros caballos. La falta de estímulos externos por el aislamiento genera que el equino busque gratificarse con autoestimulación.
Las pesebreras deben permitir que el caballo mire a algún lugar con permanente actividad (caminos interiores por donde transiten otros caballos, a la media luna o a la pista en los de carrera) y que también pueda ver otros caballos y en el mejor de los casos pueda tener contacto físico con sus vecinos del establo a través de murallas bajas.
ALIMENTACIÓN
Actualmente es reconocida la importancia de la fibra en la alimentación tanto para mantener la salud física y psicológica de los equinos. Los caballos salvajes o los que permanecen en praderas, utilizan 16 horas en cosechar los pastos. Los caballos estabulados utilizan sólo 2 horas del día en alimentarse, pudiendo estar 12 horas sin hacer nada. Esta situación favorece la aparición de conductas estereotipadas.
Las formas de solucionar esto son las siguientes:
• Sacar al caballo de la pesebrera a pastorear, aun cuando el pasto sea poco.
• Proveer heno o paja al caballo durante todo el día.
• Alimentar con heno de buena calidad "ad libitum" (todo lo que quiera), y disminuir la cantidad de grano.
• Mantener a los caballos agrupados en potreros o corrales para que puedan interactuar socialmente entre ellos.
• Si es necesario la suplementación de concentrados para la actividad deportiva del caballo, el heno se puede ofrecer dentro de pelotas de malla con pequeño agujeros para que así el animal se "entretenga" sacando el pasto para comerlo. Esto también reduce el tiempo de ocio y evita que el caballo coma maderas.
AISLAMIENTO
El aislamiento social en estos animales gregarios (que viven en grupos o manadas), puede provocar graves alteraciones conductuales. Equinos aislados a temprana edad de sus congéneres, son más difíciles de amansar y de trabajar ( siendo incluso "antisociales" o inadaptados) ya que no adoptaron el comportamiento normal que les enseñan su madre y otros caballos. Esto se traduce en que caballos que viven en grupo son más fáciles de domar ( ver artículo de Noviembre).
El mantenerlos en grupos evita estos problemas, sin embargo la costumbre de tenerlos aislados para evitar lesiones por peleas entre ellos es muy difícil de modificar en las personas. Pero el costo de conductas inapropiadas es mayor que el de las posibles lesiones por vivir en grupos, es así que caballos acostumbrados a vivir de esta manera muy rara vez se provocan daños entre ellos. Además, este tipo de manejo es de menor costo que la estabulación.
Lo ideal será siempre mantener a los caballos a campo.
FALTA DE EJERCICIO
Se ha comprobado que los caballos manejados con acceso a potreros tienen mejor estado físico y mental, por lo que su rendimiento deportivo es mejor que animales estabulados y ejercitados sólo dos horas al día. El desplazamiento constante, consumiendo alimentos ricos en fibras y el permanecer en grupo es lo que genera la mejor condición física.
PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO
Ya que los comportamientos estereotipados son formas de "evasión" del caballo para sobrevivir en un ambiente estresante, por esto, las maniobras para reprimirlas o eliminarlas pueden ser aún más graves que la propia estereotipia. Las conductas estereotípicas se desarrollan como un intento de adaptación a la vida en estabulación.
Es fundamental tener en cuenta la multicausalidad de estas conductas.
La primera medida de prevención debe ser proveer un ambiente que satisfaga las necesidades de los animales.
Es necesario construir pesebreras que eviten el aislamiento del caballo y eviten el desarrollo de conductas estereotípicas.
Cuando las conductas anormales ya se encuentran establecidas y no mejoran con cambios en el ambiente, a veces es necesario recurrir a otras técnicas como los collares que se usan para evitar el "tragar aire". No existe evidencia de los resultados de la utilización de golpes eléctricos para tratar estas conductas anormales.
Finalmente, aunque las terapias quirúrgicas solucionan ciertas conductas como "tragar aire" no atacan la causa. Por esto no se recomienda realizar cirugías sin cambios en el ambiente, ya que se podrá tratar quirúrgicamente una sola generación de los caballos estabulados.
Como última recomendación, hágase asesorar por un veterinario de equinos para el diseño de las pesebreras, prevención y tratamiento de estas conductas estereotípicas.

Juan Pablo Solís R.
Lic. Medicina Veterinaria
Medicina de Equinos
Universidad de Chile
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